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Italia tendrá el mayor grupo gubernamental del Parlamento Europeo
Las elecciones europeas de 2024 serán muy cruciales para muchos Estados: para algunos supondrán un cambio radical en el equilibrio político interno, para otros será una oportunidad de tener un nuevo rumbo dentro de la Comisión Europea, insertando nombres de primer nivel en lo que será la mayoría que salga de los comicios.
Será sin duda una prueba política interesante para todos, también para ver la resistencia y estabilidad de los distintos gobiernos europeos. Sin duda, el Gobierno Meloni saldrá reforzado de esta prueba: según los sondeos, el centro-derecha italiano obtendrá 35 escaños en el Parlamento Europeo, convirtiéndose en la primera coalición de gobierno de Europa en número de representantes electos. El resultado se compone de 4 escaños para Forza Italia (FI, PPE), 8 para la Liga (LSP, ID) y el grupo del Primer Ministro Giorgia Meloni, Fratelli d’Italia (FdI, ECR), obtendrá 23 escaños, convirtiéndose en el tercer partido más presente en el Parlamento Europeo.
De hecho, el primer puesto será para la Agrupación Nacional (RN, ID), con 26 escaños, y el segundo para el Partido Popular (PP, PPE), con 25. Los democristianos unidos de Alemania (CDU, PPE) empatarán con el FdI.
Sin embargo, si los 35 escaños del centro-derecha no dan al país una mayoría relativa, también hay que decir que son pocos los países en los que las coaliciones de gobierno superan el 50% de los elegidos. Esto ocurre en Bulgaria, Hungría, Luxemburgo, Polonia, Rumanía y Eslovaquia, o en países con un gobierno nacional fuerte (Hungría y Eslovaquia) o fruto de coaliciones de amplia base.
En los demás grandes países europeos, nadie está al nivel del Gobierno Meloni: el Gobierno Scholz, formado por los socialdemócratas (SPD, S&D), los liberales (FDP, RE) y los verdes (Grüne, Verdi/ALE) se detiene en 33 escaños de los 96 disponibles para Alemania; aún peor es el Gobierno Attal, recién instalado y compuesto principalmente por fuerzas próximas a Renacimiento (RE), movimiento político fundado por Emmanuel Macron, que se detiene incluso en 18 escaños de 81.
El Gobierno de Tusk es el tercero en número de escaños, alcanzando los 31 con una composición que une a partidos pertenecientes al PPE, RE y S&D. El Gobierno de Sánchez, formado por el PSOE (S&D) y Sumar (Verdes/ALE + GUE/NGL) va mal, ya que se queda en 23, una coalición que, por tanto, es superada incluso por el PP en solitario.
En los Países Bajos aún no hay gobierno, ya que las negociaciones para la formación de un ejecutivo siguen siendo complejas. Sin embargo, la coalición indicada en las encuestas por los electores neerlandeses reuniría dos tercios de los escaños: 12 del partido de Geert Wilders (PVV, ID), 4 de la lista electoral de Pieter Omtzigt (NSC, PPE), 3 del partido del ex primer ministro Mark Rutte (VVD, RE) y 2 del grupo ruralista (BBB, PPE).
Al analizar los sondeos es importante observar también el grupo europeo «ganador» nación por nación: hasta 10 países verán al PPE como primer partido europeo, a saber, Bulgaria, Croacia, Estonia, Alemania, Grecia, Letonia, Luxemburgo, Polonia, Eslovenia y España; Portugal, Rumanía y Suecia verán en cambio una preponderancia del S&D; el ID se establecerá en Austria, Francia y los Países Bajos; Irlanda verá al GUE/NGL como primer partido, los macronianos del RE se establecerán en la República Checa mientras que los conservadores del ECR ven a Italia como su principal país de afirmación; asunto aparte para Hungría y Eslovaquia, donde dominarán el Fidesz de Orban y el Smer de Fico, que actualmente no son miembros de ningún partido europeo. En algunos Estados, más partidos obtendrán los mismos escaños, pero la tendencia clara sigue siendo un giro hacia la derecha.
Lo que es fundamental entender es cómo subirse a esta ola, para cimentar el consenso en los países donde ya hay gobierno (Italia, Grecia, Suecia, Finlandia) y para llegar al poder en aquellos donde hoy hay oposición (Francia, Alemania, España). Más allá de la Comisión Europea, que derivará de un Parlamento Europeo de composición compleja, lo fundamental es la unidad de propósito de los gobiernos. De ello dependen los verdaderos destinos de Europa y de los conservadores, liderados hoy más que nunca por Giorgia Meloni.