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México tendrá una Presidenta

Política - abril 10, 2024

Ambas partes presentaron a sus candidatos.

A medida que nos acercamos al año 2024, nos anticipamos a un acontecimiento significativo: más de 2.000 millones de personas de todo el mundo serán llamadas a ejercer sus derechos democráticos y a participar en el proceso electoral. Este momento monumental de la historia marca un punto de inflexión para las sociedades democráticas de nuestro planeta, y culminará con las esperadísimas elecciones estadounidenses de noviembre.

Presidente Andrés Manuel López Obrador

Cabe señalar que un indicador importante de la trayectoria política de los estados del Sur de América es el resultado de las próximas elecciones generales mexicanas. Específicamente, el Artículo 83 de la Constitución Mexicana estipula que el actual Presidente, no puede buscar la reelección para un segundo mandato, ya que la Presidencia de México está limitada a una duración de 6 años.

El Presidente, periodísticamente abreviado como AMLO, es una expresión del partido MORENA (Movimiento Regeneración Nacional): el partido, fundado en 2014 tras la asociación preexistente, es un partido nacionalista de izquierdas afiliado al Foro de Sao Paulo, es decir, la alianza de partidos socialistas y comunistas de América Latina que en algunos casos también incluye bandas armadas de guerrilleros.

Claudia Sheinbaum

 

Morena presentará a Claudia Sheinbaum como candidata a la Presidencia de México en coalición con el Partido del Trabajo (PT ) y el Partido Verde Ecologista de México (PVE). Sheinbaum, de 62 años y de origen judío, ha sido hasta ahora Jefa de Gobierno de la Ciudad de México (una importante Gobernación de Estado, ya que la capital mexicana tiene más de 9 millones de habitantes) tras haber sido Alcaldesa de Tlalpan, uno de los principales «fraccionamientos» de la Ciudad de México. Se ha distinguido, a lo largo de los años, por sus investigaciones sobre desarrollo sostenible, fruto de sus estudios de física e ingeniería.

 

 

Xóchitl Gálvez

Casualmente, la principal contrincante es también una mujer, Xóchitl Gálvez, de la coalición de centro-derecha que incluye al Partido Acción Nacional (PAN, pro-PPE), el Partido Revolucionario Institucional (PRI, pro-S&D) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD, pro-S&D).

La presencia de dos partidos socialdemócratas en una coalición de centroderecha no debería sorprender, sobre todo por su historia: el PRI fue, de hecho, el partido que gobernó México de manera totalitaria de 1929 a 2000, regresando al poder de 2012 a 2018 con Enrique Peña Nieto proponiendo un sincretismo sustancial entre una política autoritaria y corporativista y una economía neoliberal; el PRD, por su parte, es un partido progresista del que AMLO fue miembro antes de formar Morena y llegar a la Presidencia de México.

 

Gálvez, quien ganó las complejas primarias de la coalición, venciendo sólo en la segunda vuelta a la priista Beatriz Paredes Rangel, ha participado en política desde el año 2000, pues primero fue alcaldesa de Miguel Hidalgo y de 2018 a 2023 estuvo en el Senado representando al PAN siendo independiente. De familia otomí, una de las poblaciones indígenas que aún existen en México, Gálvez fundó hace más de treinta años High Tech Services, empresa dedicada al desarrollo de proyectos de alta tecnología, marcando una de las empresas más florecientes y vanguardistas de todo el estado mexicano.

La situación electoral parece bastante clara: las últimas encuestas muestran a Sheinbaum en torno al 60% del consenso con Gálvez entre el 33 y el 34%, con un crecimiento de más de 5 puntos porcentuales para Morena. Sin embargo, la situación política es muy compleja.

En una larga entrevista con CBS, AMLO hizo un balance de la situación mexicana, empezando por el tema migratorio. Inmigración a Estados Unidos, tras una reunión con el presidente estadounidense Joe Biden (Dem, pro-S&D) el número de cruces fronterizos se ha reducido a la mitad, pero ahora AMLO ha pedido un plan para frenar la inmigración que incluya la asignación por parte de Estados Unidos de 20.000 millones anuales para los países de América Latina y el Caribe, la retirada de las sanciones a Venezuela, el fin del embargo a Cuba y la legalización de los mexicanos que viven y trabajan legalmente en Estados Unidos. AMLO también considera increíble la propuesta de Trump de construir un muro en la frontera entre México y Estados Unidos.

También es delicada la cuestión social, que ve cómo aumentan los «cárteles» de la droga en todo el país, sobre todo debido a la producción masiva de fentanilo que actualmente hace estragos en América y también en Europa. El gobierno mexicano ha invertido millones en la creación de empleo para evitar que los jóvenes se dediquen a actividades ilícitas, al tiempo que intenta no acabar con los cárteles por la fuerza.

El uso de la fuerza contra los cárteles ha disminuido durante el mandato de AMLO; sin embargo, los asesinatos políticos se han triplicado. En 2018 fueron asesinados 94 funcionarios o candidatos, frente a los 355 de 2023.

México es, por tanto, un país que, a pesar de acercarse cada vez más al bloque de países no alineados, sigue representando uno de los principales socios de Estados Unidos, pero también uno de los lugares más poderosos del crimen organizado estadounidense. Y a partir del 2 de junio de 2024, habrá un nuevo Presidente para gestionar todo esto.