Donald Trump ha aumentado su ventaja sobre Joe Biden tras el desastroso debate de la semana pasada para el presidente en funciones. Según una encuesta publicada hoy por CBS News, el ex presidente tiene ahora una ventaja de tres puntos en los estados clave y de dos puntos a nivel nacional. Concretamente, Trump está al 50% a nivel nacional frente al 48% de Biden, y al 51% frente al 48% de Biden en estados clave.
Hace un mes, en la misma encuesta, Trump sólo tenía una ventaja de un punto en los estados clave. Este aumento se debe principalmente a la mayor determinación de los votantes republicanos a votar «definitivamente».
Tres cuartas partes de los votantes estadounidenses creen que el Partido Demócrata tendría más posibilidades de conservar la presidencia si el candidato no fuera Biden. Una encuesta realizada por SSRS para la CNN revela que el índice de aprobación del Presidente también ha alcanzado un nuevo mínimo tras su actuación en el primer debate presidencial. A nivel nacional, Trump sigue siendo el favorito, con una ventaja de seis puntos sobre Biden, estable en comparación con la encuesta de abril. Sin embargo, hay indicios de que ambos candidatos han consolidado su apoyo entre sus propios votantes en los últimos meses.
Aumenta la presión sobre Joe Biden, y se espera un intenso fin de semana del 4 de julio para el presidente estadounidense. Según el New York Times, Biden admitió por primera vez a uno de sus aliados clave que está considerando si continuar con su intento de reelección, reconociendo que quizá no pueda salvar su candidatura a menos que convenza al público de su idoneidad. Esta versión fue rápidamente desmentida por el portavoz de la Casa Blanca, Andrew Bates, que calificó el artículo de «absolutamente falso». «Si el NYT nos hubiera dado más de siete minutos para comentar, lo habríamos dicho», escribió Bates en X. Sin embargo, la fuente del periódico informó de que el presidente, aunque sigue profundamente comprometido con la lucha por la reelección, sabe que las comparecencias del fin de semana, incluida una entrevista con ABC News, deben salir bien. Fuentes citadas por la CNN confirman que Biden ha admitido en privado que los próximos días serán cruciales para determinar si puede salvar su candidatura.
El ex presidente Barack Obama también ha reconocido que el ya difícil camino de su ex vicepresidente para conseguir otro mandato se ha vuelto aún más complicado tras la decepcionante actuación en el debate contra Donald Trump. Según informó el Washington Post, Obama habló con Biden tras el enfrentamiento televisivo y le ofreció su apoyo. Mientras tanto, crece la oposición dentro del Partido Demócrata, con al menos 25 representantes dispuestos a pedir al presunto candidato que se aparte en caso de nuevos pasos en falso. Tras las dudas de Nancy Pelosi, el representante por Texas Lloyd Doggett fue el primero en decir que Biden «debería tomar la dolorosa y difícil decisión de retirarse». El representante centrista de Maine, Jared Golden, explicó que la «pobre actuación» en el debate «no fue una sorpresa» y, por tanto, ahora más que nunca Biden necesita dar un paso atrás. El ex secretario de Vivienda de Obama, Julián Castro, también declaró que Biden debería retirarse «absolutamente». Biden, sin embargo, achacó la debacle del jueves pasado al cansancio de los repetidos viajes al extranjero. «No fui inteligente. Decidí viajar por todo el mundo un par de veces justo antes del debate, atravesando no sé cuántas zonas horarias, creo que al menos 15… No escuché a mi equipo… Y luego casi me quedo dormido en el escenario», dijo en una recaudación de fondos en Virginia, y añadió: «No es una excusa, sino una explicación».
Ayer, el presidente se reunió con gobernadores demócratas, algunos en persona y otros a distancia, para intentar tranquilizarlos y, en algunos casos, arreglar las cosas. El gobernador de Minnesota, Tim Walz, por ejemplo, compartió la sorpresa y frustración de algunos de sus colegas por no haber sido contactado por el propio Biden al día siguiente del duelo televisivo. Mientras tanto, el gobernador de California, Gavin Newsom -considerado uno de los posibles sustitutos si Biden se retira-, voló a Washington para asistir en persona a la reunión y «apoyar al presidente».
Mientras tanto, según siete fuentes de la campaña de Biden, la Casa Blanca y el Comité Nacional Republicano, la vicepresidenta Kamala Harris se considera la mejor alternativa si el presidente decide no continuar en la carrera (también porque heredaría los fondos y la red de la campaña).