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Vox tiene la llave

Política - junio 23, 2023

Los resultados de las recientes elecciones locales y regionales han desplazado el panorama político español hacia la derecha, tanto que, en un movimiento táctico, el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, del Partido Socialista Español (PSOE), convocó unas elecciones anticipadas para consolidar su menguante poder, mientras los partidos de la derecha se centran en construir gobiernos de coalición. Pero la derecha, en contra de las expectativas de Sánchez, se ha apresurado a alcanzar estos acuerdos.

El Partido Popular (PP) y el conservador Vox (ECR) gobiernan ahora la Comunidad Valenciana, antaño bastión del PSOE. En su corto periodo de tiempo, el gobierno de coalición ya ha puesto en marcha políticas clave para revertir el impacto que las fuerzas independentistas han impuesto a los valencianos durante décadas. Esta misma semana, el nuevo gobierno anunció que cancelaría las subvenciones a estas organizaciones. Debido a la laxa postura del gobierno nacional ante estos grupos, las regiones están dando un ejemplo necesario en la lucha contra la tendencia separatista. Durante demasiado tiempo los socialistas le han aplacado en detrimento de la integridad territorial de España. La coalición de fuerzas constitucionalistas de derechas demuestra que deben y pueden ser detenidos.

A pesar de esta historia de éxito, Alberto Núñez Feijoo, presidente nacional del PP, ha adoptado una postura confusa a la hora de formar gobierno en las comunidades autónomas donde son posibles las coaliciones de derechas. En las semanas posteriores a las elecciones autonómicas del 28 de mayo, Feijoo ha repetido constantemente que «el partido más votado debe ser el que gobierne». En el caso de la comunidad autónoma de Extremadura (suroeste de España), siguiendo la lógica de Feijoo, esto significaría que el PSOE debería gobernar, aunque no tenga suficientes escaños en el parlamento regional, y juntos el PP y Vox, sí. El planteamiento de Feijoo olvida la naturaleza parlamentaria de nuestros sistemas de gobierno locales y nacionales, en los que la formación de mayorías y coaliciones garantiza que el gobierno se forme de la manera más representativa posible.

Quizá su postura se deba al miedo a que se le asocie con Vox, un partido que ha sido objeto de varios ataques mediáticos y de una demonización general de su imagen y de la de sus dirigentes por sus firmes posiciones conservadoras en materia de inmigración, soberanía y valores familiares. A pesar de las reticencias de Feijoo, los partidos regionales del PP, como en la Comunidad Valenciana, están dando señales de que están dispuestos a gobernar en coalición con Vox, allí donde sea posible alcanzar una mayoría que arrebate el poder a la izquierda.

Lo más probable es que Feijoo se vea obligado a construir un gobierno de coalición con Vox tras las elecciones anticipadas del 23 de julio, no sea que los socialistas construyan otro gobierno de coalición bajo el liderazgo de Sánchez. Sin embargo, se ha especulado con la posibilidad de que Feijoo, que previsiblemente ganará las elecciones generales, ofrezca al Partido Socialista una cuota de poder. Esto sería un errorEllo supondría avalar las nefastas políticas socialistas de Sánchez, que han fomentado la inestabilidad y la polarización entre la población española. Durante esta legislatura, un proyecto de ley mal concebido y lleno de errores de cálculo jurídico ha liberado a decenas de violadores condenados. Sánchez también ha indultado a los sediciosos del intento de golpe de Estado de 2017 en la región española de Cataluña. El PP no debería estar asociado a estas acciones.

Vox es el aliado natural del PP. Su líder, Santiago Abascal, ya se ha ofrecido a «echar una mano» a Feijoo, siempre y cuando el PP «respete a los votantes de Vox» durante las negociaciones. Rechazar a Vox por sus posturas conservadoras, muchas de las cuales comparten los votantes del PP, es prejuicioso. Sólo juntos puede haber una alternativa al consenso socialista reinante. El resultado en Extremadura arrojará algo de luz sobre la estrategia del PP en los próximos días. Esperemos que sea el adecuado para España.